Venta de pisos regulada

La venta de pisos va a ser regulada por el Gobierno para controlar los abusos en la compraventa de pisos, que se han elevado cuantiosamente desde el año 2000 a causa del auge de la vivienda. Los 95.000 operadores que actúan en España (agencias inmobiliarias, profesionales autónomos y agentes de la propiedad) no están sujetos a una normativa concreta ni se les demanda un título para trabajar, una falta de control que origina en ocasiones comisiones excesivas (10%) y prácticas especulativas. El Gobierno se ha comprometido a escuchar las demandas de los 8.000 agentes de la propiedad colegiados, que solicitan un registro público y que se exijan seguros de responsabilidad civil a todos.

Los precios de los pisos no paran de subir - acumulan un incremento del 150% desde el 98 - en un mercado en alza - el año pasado se vendió un millón de pisos -, en el que cada vez es más difícil encontrar una vivienda con un precio sensato. Para evitar problemas y ahorrar tiempo, un número creciente de ciudadanos acude a una agencia inmobiliaria en busca de un trabajador cualificado que les ayude a buscar piso (compra o alquiler). En consecuencia, la intermediación ha experimentado en estos años su propio apogeo, pero ha coincidido con la liberalización de este mercado en el año 2000, que ha llevado a un aumento de los abusos y de la especulación que el Gobierno quiere frenar.

Es suficiente con un teléfono móvil para intermediar en la compraventa de una vivienda. No son necesarios ni títulos oficiales, ni seguros que cubran las operaciones. Obviamente, no todas las agencias inmobiliarias abusan de sus clientes, pero cualquier persona puede intervenir en las transacciones desde que se aprobará un decreto de medidas liberalizadoras del sector inmobiliario y que en el año 2003 se convirtió en ley.

Fuente: ELPAIS.es|Economía